El Presidente Alberto Fernández anunció que el aislamiento preventivo obligatorio regirá hasta que termine Semana Santa. Dijo que se vive «una guerra contra un enemigo invisible» y, en lÃnea con el Papa Franciso advirtió que «aquà nadie se salva solo». Pidió que en los barrios humildes se cumpla el aislamiento y destacó que en medio de la incertidumbre «sà sabemos que si cumplimos con ciertas cosas el dolor será menor». Adelantó nuevas medidas económicas y les mandó un fuerte mensaje a los empresarios: «Muchachos, les tocó ganar menos»