Ante la proximidad de la celebración de Semana Santa, el área de EpidemiologÃa del ministerio de Salud de la Provincia recomienda a la población extremar las precauciones en la compra y consumo de pescados y mariscos, a los fines de evitar casos de intoxicación alimentaria. Los productos que suelen consumirse en estas fechas son rápidamente perecederos y requieren una adecuada refrigeración. Las intoxicaciones o infecciones suelen producirse por la contaminación de alimentos, a través de recipientes o bien en su proceso de preparación, conservación (cadena de frÃo), manipulación y distribución. Los sÃntomas que pueden provocar los alimentos contaminados pueden detectarse en horas o dÃas posteriores a la ingesta, variando según el tipo de agente responsable (microorganismos, toxinas, parásitos), la cantidad de alimento contaminado consumido, o el estado de salud del individuo.
El malestar comienza generalmente con dolores abdominales fuertes (cólicos), diarrea, vómitos y dolor de cabeza.
Las recomendaciones a tener en cuenta son:
Comprar pescados y mariscos en lugares de expendio y supermercados habilitados.
Las pescaderÃas deben exhibir este tipo de alimentos refrigerados o cubiertos de hielo.
El pescado debe tener las branquias rojas, las escamas bien adheridas al cuerpo y los ojos brillantes. Su carne debe ser firme y no debe ceder con la presión del dedo.
El olor a amonÃaco es lo que indica el estado de descomposición del pescado.
El pescado seco o salado, no debe presentar manchas negras y su olor debe ser caracterÃstico.
Los camarones y langostinos no deben presentar manchas en su superficie, olor desagradable o desprendimientos entre la cabeza y el tronco. Estos son signos de deterioro.
Los productos de pesca deben estar bien cocidos y después de preparados deben ser consumidos lo antes posible.
Los enlatados no deben presentar abolladuras ni estar inflados. Verifique su fecha de vencimiento.
Además, para lograr una correcta y sana alimentación, es clave verificar no sólo la buena calidad de los productos sino también la forma de preparación, su adecuada conservación y que sean servidos en forma higiénica.
Por eso, también debe considerarse las siguientes medidas:
Cocine bien los alimentos.
Consúmalos inmediatamente después de cocinarlos.
Cocine lo justo, trate de no guardar sobras ni recalentar la comida.
No corte la cadena de frÃo de los alimentos que necesiten refrigeración.
Evite el contacto entre los alimentos crudos y los cocinados
Lávese las manos con frecuencia. Antes y después de preparar comidas.
Mantenga limpias todas las superficies de la cocina y los paños que utilice.
Mantenga los alimentos fuera del alcance de insectos, roedores y otros animales.
Utilice agua potable. Si el suministro no es confiable, deberá hervirla.
Si come fuera de su hogar, exija que los alimentos estén bien cocidos y controle que los aderezos estén correctamente envasados.
Al momento de la conservación del pescado es recomendable:
Mantenerlo no más de uno o dos dÃas en la parte más frÃa de la heladera y hasta tres meses en el freezer.
No descongelar y volver a congelar los pescados y mariscos.
Al descongelarlos, no hacerlo a temperatura ambiente.
Una vez preparados, consumirlos lo antes posible.
Consumir los pescados bien cocidos.